Y en Otoño... Berenjena.

El final del verano ha llegado y el Otoño ha tomado su relevo, los días se acortan, el sol sale más tarde por las mañanas, y el anochecer se aprecia antes y más claramente, empieza el frío, y las hojas de los arboles caducos amarillean y caen cubriendo el suelo...

En Cocina, con el otoño volvemos a recobrar multitud de verduras y hortalizas como el apio, el calabacin , el repollo,  las coles de Bruselas, etc.

Entre las protagonistas de esta estación encontramos las berenjenas y a ellas vamos a dedicar este productos de temporada de este año.

La berenjena es originaria de la India donde se cultiva desde hace más de 4.000 años. Llegó a España durante la Edad Media, gracias a los musulmanes,cuando éstos ocuparon nuestro país. Y fuimos los españoles los que la introdujimos a Europa, donde se extendió rápidamente, sobre todo a Francia e Italia.

Pertenece a la familia de las Solanáceas, pertenece a la especie silvestre Solanum melongena, variedad esculentum.

Es una planta de climas cálidos o templados, es muy sensible al frío y necesita un periodo de crecimiento caliente, para poder disfrutar de una buena cosecha y de su óptimo sabor.

Contiene 90% de agua, pocas grasas, fibra (si se toma con piel) y pocas calorías, por lo que se aconseja en las dietas de adelgazamiento.

Las berenjenas contienen: Vitaminas: E, A, C, B1, B2, Minerales:  hierro, calcio, fósforo, , potasio.

Estas recomendadas para:  la circulación, reducir el colesterol,  prevenir la arteriosclerosis, estimular la bilis,  para el reúma, etc.

Existen muchas variedades y se dividen en tres grandes familias según su tamaño y forma:

• Berenjena Oval Grande: Oscura, Épica, Campana negra, Híbrido Ruidoso, Mágica Negra clásica, Belleza negra...
• Berenjena alargada: Pequeños dedos, Inhiban, Jim delgado.
• Berenjena Ornamental: Huevo de Pascua.

Consejos para comprar berenjenas: Para elegirlas bien, no deben de ser demasiado grandes, y si tersas y brillantes. Cuando son demasiado maduras, aparecen manchas en la piel, que luego al pelarlas, son manchas marrones en su piel blanca y además amargan.

Conservación: debe ser en un lugar refrigerado hasta su consumo y debe consumirse lo más pronto posible (aguanta poco más de diez días), ya que el fruto pronto desarrolla manchas pardas y empieza a amargar. No obstante existen procedimientos de escabechado que permiten prolongar este periodo por un año.

Consumo:  las berenjenas pueden comerse de muchas formas: fritas, rellenas, al horno, en guisos y sopas, pero nunca crudas ya que  resultan tóxicas.